Noticias desde Suramérica

Pasado ya más de un mes de haber partido de suelo nacional, la agrupación Palíndromos Teatro Independiente, se encuentra en estos momentos en Bolivia, prestos a iniciar la última de las funciones en la ciudad de La Paz con el montaje “Litio (Monólogo sobre la Bipolaridad)” que estará de regreso en el país en exactamente 30 días.

La gira de los nacionales es posible gracias a las alianzas establecidas con grupos de teatro de las diferentes naciones suramericanas, quienes les reciben y programan sus funciones. Es así como ya han estado en Colombia, Ecuador y Perú; y de la misma manera, en años anteriores visitaron México y el resto de Centro América.

“Este viaje por Suramérica no es solo una gira de trabajo, sino que también nos ha servido para conocer muchos lugares que deseábamos visitar, como la Ciudad de la Mitad del Mundo, Machu Picchu, la Plaza de Botero y el Lago Titicaca, los que, difícilmente hubiésemos podido accesar en un mismo viaje, de no ser gracias a la gira del grupo” comenta Diego J. Salgado, director de la agrupación.

Con relación a las funciones realizadas hasta el día de hoy, se expresaron de esta forma: “Nos hemos logrado adaptar a las condiciones de los espacios a pesar de que no hayan sido las mas idóneas y el publico ha tenido una buena respuesta a nuestro trabajo. En Perú firmamos autógrafos y en general, los colegas nos han dado una critica muy positiva” apuntó María Laura Alvarado, actriz de la obra “Litio”.

Desde el 9 de abril, fecha en que abandonaron el suelo nacional, Palíndromos ha recorrido miles de kilómetros, visitando cuatro países y decenas de comunidades. En Colombia, estuvieron en Bogotá, Medellín, Calí, Buga y el lago Calima. En Ecuador estuvieron en el centro de Quito y el la Ciudad de la Mitad del Mundo y planean, para principios de junio regresar a Quito y esta vez visitar Ambato y Baños. En Perú, han estado en Tumbes, Lima, Arequipa, Cusco y Puno, además, también para inicios de junio estarán en Chiclayo.

“La experiencia ha sido enormemente enriquecedora; hemos andado como nunca en la vida y hemos podido conocer los diferentes matices que presentan nuestros vecinos países suramericanos. Toda la diversidad cultural, gastronómica y de clases sociales que existe en un mismo país entre sus ciudades centrales y las fronterizas, así como, entre los diferentes países del sur.”, agregó Salgado.

En Colombia, los encargados de recibir a la delegación costarricense fueron los muchachos de la Academia y Teatrino Don Eloy. En sus instalaciones, los Palíndromos dieron dos funciones: “Estamos muy agradecidos con todas las personas que nos atendieron durante nuestra estadía en Colombia, especialmente con Carlos Moreno y su esposa Danury Guaje que nos abrieron las puertas de su casa y nos hicieron sentir como de la familia. Así mismo, queremos extender un enorme agradecimiento a Joseph Rincón, por ser nuestro guía, camarada y amigo. Esperamos tenerlos a todos pronto en Costa Rica” manifestaron.

Las funciones que Palíndromos realizaría en Ecuador debieron postergarse hasta junio debido a un choque de fechas, pero esto no impidió que los muchachos disfrutaran conociendo la ciudad de Quito. “La calle donde nos hospedamos era un lugar muy internacional. Habían actividades todos los días y era frecuentada por gente de todas las nacionalidades, fue un intercambio cultural muy interesante” expresó Alvarado.

Pasados los días en Ecuador llegó el primero de mayo, día de inicio de la novena edición de la FITECA en Comas-Lima-Perú, fiesta de teatro de la que Palíndromos participa por segundo año consecutivo. Los nacionales se presentaron para la cuarta fecha, el día martes 4 de mayo a las 10:00 pm en la sala chica. “El festival, al igual que el año pasado, nos brindó la posibilidad de compartir con colegas de diferentes partes de Latinoamérica de manera simultanea y ver sus trabajos, al mismo tiempo que ellos nos hacían una retroalimentación del nuestro”, comenta el director de la agrupación.

Hasta el momento, el recorrido que les presentó mayor reto fue el visitar Machu Picchu: “caminamos cerca de 20 horas sin parar: entre llegar a Machu Picchu, recorrer las ruinas y regresar. Tomando en cuenta que hicimos el camino de ida por las vías del tren de noche, caminando en medio de la naturaleza y alumbrándonos con un foco solamente. Además de eso, Diego tuvo una inflamación en el bazo desde Cusco, que complicó toda la travesía” comenta Alvarado.

Los muchachos se encuentran muy expectantes de las funciones que les queda por realizar y esperan seguir cosechando éxitos en Argentina, Uruguay, Perú y Ecuador.